Frapuccinos de Starbucks muy marketinianos
¿Por qué a España no llegan productos tan chulos como los Frappuccinos de Starbucks? Bueno, a veces tenemos la suerte de que nos llegue una versión con algún sirope normalito, ¡pero es que acaba de salir el Frappuccino Unicornio y no lo vamos a catar! Y no es que nosotros seamos unos fanáticos de los unicornios de arco iris, pero sí lo somos de las acciones de marketing y de los productos con mucho, MUCHO, color. ¡Queremos probarlo, leñe!
Las redes sociales ya están llenas de chorrocientas fotos con este adorable Frappuccino, echándole un pulso a los helados góticos que tan de moda se han puesto. ¡Guerra de titanes! El caso es que no es la primera vez que desde España nos tenemos que conformar con los collages de Pinterest e Instagram, e imaginarnos a qué sabrá un Frapuccino con purpurina. Ya Starbucks lo petó un Halloween con Frapulla, un Frapuccino con los colores propios del atuendo de Drácula: nata blanca como la camisa, sirope oscuro como la capa y sirope rojo, como la sangre de todas sus víctimas.
También ha habido otras versiones que han ido más allá, como el American Cherry Pie Frappuccino, que paradójicamente solo se lanzó en Japón y combinaba compota de cereza, nata y vainilla, coronado por una cúpula de pastel. Otra idea de Starbucks fueron los mini Frappuccinos, con menos calorías y azúcares, pero no porque estuvieran hechos a base de leche de soja y chocolate desgrasado, sino porque el tamaño de esos mini vasos no dan para más. ¡Ideales para darse un capricho sin que los remordimientos acechen en exceso! Lo malo: en 30 segundos te lo has terminado. Fue bonito mientras duró…
Y nosotros, mientras tanto, lo más original que nos encontramos en la carta española son los Frappuccinos de té. Desde aquí, hacemos un llamamiento a todos los fans de Starbucks para que, si han probado estas delicias, nos cuenten a qué saben y podamos saborearlo en nuestra imaginación. Pero vamos, que si nos los ponen a la venta en España, mejor que mejor. Jijiji.