Etiqueta: marketing de contenidos

5 deformaciones profesionales de los community managers

Como todas las profesiones, los community manager también pecamos de deformación profesional, con el añadido de que se entremezcla en nuestro día a día personal con demasiada facilidad. ¡Pero qué le hacemos! Nuestro trabajo nos exige estar siempre ojo avizor a las últimas novedades para compartirlas con nuestros seguidores. Si lo hacemos para gente que no conocemos, ¿cómo no vamos a hacerlo para nuestros amigos y familiares?

1. Pensar bien cómo decir las cosas.

Cada copy que escribe un community manager lleva una estrategia detrás porque buscamos que enganche a la gente, comparta la publicación e interactue con ella en las redes sociales. ¡No puedes arriesgarte a publicar cualquier chorrada y cargarte las estadísticas! Esto es muy útil en la vida porque, ¿a caso no has oído que lo importante no es lo que se dice, sino cómo se dice? Anda, ve y pídele un aumento de sueldo a tu jefe siguiendo esta técnica, a ver qué pasa…

2. Consultar las redes sociales de tus clientes con el mismo interés que si fueran las tuyas personales.

Las redes sociales de tus clientes nunca pueden quedar abandonadas por lo que las consultas continuamente para que no se te escape nada. La cuestión es que cuando te aburres mientras esperas al metro o autobús empiezas consultando tu Facebook y tu Instagram, y acabas por echarle un vistazo hasta al Trip Advisor de ese cliente que tiene un restaurante. La excusa es que tienes que estar al loro de lo que se cuece pero admítelo, no sabes dónde está la línea entre trabajo de community manager y vida personal.

3. Hacer las fotos como si todas y cada una de ellas fueran material de redes sociales.

Da igual que sea de fiesta con tus amigos que el cumpleaños de tu sobrino. ¡No concibes hacer fotos al tuntún sin seguir unas pautas mínimas de fotografía! No aceptas posados a contraluz, todo el mundo tiene que salir bien aunque ello suponga 600 fotos, y el fondo siempre está estratégicamente elegido. Así, obviamente, acabas siendo el fotógrafo del grupo.

4. Destacar un titular de cualquier evento, que te serviría de título para una publicación en redes sociales.

Acabamos el merchandising de un cliente. “¡Así de chulo ha quedado este merchandising para Nosequién!”. O el lunes te compras un café de camino a la oficina. “Empezamos el lunes a tope de café para comernos la semana”. O el precio de la lechuga ha subido. “Alucina, vecina, con el precio de la lechuga. ¡A este paso me voy a hacer las ensaladas con césped del parque!”. Ains, los community manager somos así, no lo podemos evitar. Nuestro cerebro enseguida destaca un titular resumen digno de ser publicado en algún lado.

5. Dar la definición de community manager cada vez que dices en qué trabajas

Todavía son muchos los que siguen sin conocer nuestra profesión, o los que la resumen como “los que estamos metidos en Facebook todo el día”. Por eso, cuando te preguntan que en qué trabajas, te sale el speech de carrerilla, con sus puntos y sus comas, para que a todo el mundo le quede clarito a qué nos dedicamos. ¡Porque el curro de community manager mola mucho y es una profesión seria!

3 conceptos clave si tienes página web

¡Aaaaiiiiissss! ¡Que ya tienes página web! ¡Qué emoción! Cualquiera que te busque en Google podrá encontrar tu recién estrenado escaparate. Pero no vale con lanzarla a la red y olvidarte de ella, porque aún siendo un elemento más estático que las redes sociales, una página web debe tener cierto punto de dinamismo para que permanezca viva. Las analíticas que ofrece Google son infinitas, pero nosotros te recomendamos que te fijes en estas tres para ir entrando en materia. Cuando las tengas controladas, pasamos al siguiente nivel, Maribel.

1. Tráfico a la web

Está estupendo que tengas página web pero no debes perder de vista el tráfico que pasa por ella. Te interesa, y mucho, la cantidad de visitas que llegan a tu web, de dónde proceden por dónde se mueven, qué secciones son las más visitadas, porque estos son indicadores del funcionamiento y usabilidad de tu página web. Todos sabemos que los supermercados están diseñados para potenciar la compra de productos y que los chicles al lado de la cola en la caja no están ahí por casualidad. Pues en una página web igual.

2. Tasa de rebote

La tasa de rebote es el porcentaje de visitas que, según entran en tu web, salen. Sin hacer nada, ni click, ni curiosear, nada. Esto puede deberse a que a tus visitas no les interesa el contenido de tu home (porque no sea el apropiado o porque se han metido sin querer) o a un mal funcionamiento de la web. Independientemente de la razón, una tasa de rebote que va in crescendo nunca es un buen signo, así que ponte a investigar cuál es el problema para aplicar soluciones.

3. Tiempo en la web

¿Qué haces cuando ponen en la tele una peli que no te interesa? Cambias de canal. ¿Y cuando entras en una tienda y descubres que no te gusta nada? Te vas. Que tus visitas pasen tiempo en tu página web es buena señal porque hay algo que los retiene, ¡así que estate al loro! Cúrrate al máximo tu web para que su usabilidad sea la adecuada, el contenido sea de calidad y nunca olvides que debe ser resposive. Así conseguirás que tus usuarios disfruten con su visita y eso se acabe traduciendo en nuevos clientes.

3 cosas que necesitas saber de Facebook

En pocas palabras, Facebook es una red social en la que puedes publicar texto, fotos y enlaces para que los vean tus amigos o seguidores, pero en la práctica es mucho más, y en para una empresa, mucho muchísimo más. Gestionar tu página de Facebook no supone subir lo que te venga en gana y acumular me gusta al tuntún, por lo que antes de iniciar esta aventura párate a responder esta pregunta: ¿cuál es mi estrategia en esta red social? ¡Y nada de hacer la cobra! Porque sin una respuesta clara, el camino que recorras en Facebook será como ir dando palos de ciego. ¿Qué necesitas saber sobre esta red social?

1. Estrategia

Nos repetimos más que el ajo, ¡pero es que sin una estrategia clara no vas a ningún lado! Hay que decidir cuál será la línea editorial a seguir, lo que implica determinar el tono de voz y la temática del contenido acorde con nuestro negocio. Las redes sociales son como una plantita, hay que cuidarlas todos los días. Eso sí, ello no implica que publiques a todas horas, sino que hagas un seguimiento de las analíticas y, según la estrategia decidida y el comportamiento de tu público, adaptes tu contenido para conseguir los mejores resultados.

2. Alcance e interacción

El alcance e interacción son las métricas principales de Facebook y hay que saber interpretarlas sabiamente. El alcance es el número de personas que ven nuestra publicación, por lo que cuantas más la vean mejor. Pero si no hay interacción, entonces hay algo que estamos haciendo mal porque, ¿de qué sirve que mucha gente nos vea si no le gustamos a nadie? Y viceversa, por muy genial que sea una publicación no hacemos nada si no la ve ni Peter. Ten un ojo siempre atento a ambos, identifica las razones por las que evolucionan así y actúa en concordancia.

3. Conversión

De nada nos sirve un alcance o interacción muy altos si esto no se convierte en lo que vamos buscando. Más ventas, más reservas, más seguidores en las redes sociales… Sea cual sea el objetivo, no hay que perderlo nunca de vista y montar la estrategia para conseguirlo. Si vemos que nos vamos por los cerros de Úbeda, entonces hay que parar y reconducirlo. Toda empresa quiere unos ingresos altos y por eso Facebook es una herramienta de apoyo para ir a por ello. ¡No hagas un mal uso de esta red y desperdicies la oportunidad de hacer algo estupendo para tu negocio!

facebook-estrategia

Imágenes: ADEN B.S.

5 razones para contratar a un community manager profesional

No nos cansaremos de repetirlo: ¡el trabajo de community manager es mucho más que pasarse el día en Facebook! Y ojo, que es verdad que lo hacemos, pero no nos dedicamos a cotillear las fotos de las vacaciones de nuestros amigos, sino que estamos ojo avizor creando contenido, al loro de las últimas noticias, atendiendo comentarios de la gente, ¡siempre a tope para que la marca a la que damos voz tenga el mejor rollo del mundo con el público! Si eres de los que considera que este trabajo podría hacerlo un becario sin experiencia o tu sobrino, que se pasa el día enganchado a las redes sociales en el móvil, te damos 5 razones por las que deberías contratar a un community manager profesional de una vez por todas.

[two_thirds]

1. ¿Trabajas con una estrategia y calendario de contenidos?

Sí, sí, has leído bien. El marketing digital no consiste en abrirse una cuenta en Facebook, publicar cuando se nos antoje (ya sean seis veces al día o una vez cada tres meses) y lo que a nosotros nos parezca que “pega”. El community manager te ayuda a definir los objetivo que quieres conseguir a nivel de imagen y comunicación, y marca el camino para conseguirlo. La herramienta fundamental es el calendario de contenidos de cada red social y el blog, para que todas las publicaciones estén bajo control.

[/two_thirds]

[one_third_last]camiseta-cm [/one_third_last]

2. Cuidar al máximo la atención al cliente

Las redes sociales son mucho más que un escaparate para subir fotos. Son un canal de comunicación bilateral con las marcas, ya que permiten entablar una conversación con ellas. El community manager siempre está pendiente de las redes sociales para atender a quien te contacte a través de ellas porque, de no ser así, estarás perdiendo clientes. Porque ¿qué pensará un cliente si te pide información de tus productos y tu directamente ni le contestas? Ojo, que en Internet estás a un click de la competencia y todo detalle cuenta.

3. Diplomacia en la gestión de la reputación

Si alguien hace un comentario negativo sobre tu negocio, la solución no es encararse, a ver quién se pone más choni, a lo Hermano Mayor. Por supuesto, siempre habrá comentarios positivos y negativos, y hay que saber gestionarlos, por eso el community manager rebosa diplomacia y estará al pie del cañón para apagar los fuegos de forma cordial y agradeciendo las palabras bonitas de los seguidores. Los clientes quieren sentirse cuidados por lo que, nuevamente, ¿qué imagen estás dando si les ignoras cuando te hablan?

4. Análisis de métricas. No te pierdas con los números, gráficos y estadísticas

Y es que todo el tinglado del calendario de contenidos y gestión de la imagen de tu marca tiene su seguimiento, sus métricas que hay que saber leer e interpretar para luego actuar en consecuencia. ¡No tiene sentido hacer una campaña de comunicación sin medir su efectividad! El community manager te traducirá esos números que cuentan cositas interesantes sobre tus seguidores, así podrás afinar mejor tu estrategia. ¿O prefieres seguir invirtiendo tiempo y dinero al tuntún?

No es por asustarte pero ¿sabrás traducir estas analíticas? ¡Pon un community en tu vida!
No es por asustarte pero ¿sabrás traducir estas analíticas? ¡Pon un community manager en tu vida!

5. Hay vida más allá de Facebook

Si hay que elegir una red social, todo el mundo se decanta por Facebook. ¡Pero es que hay muchas más! Y no estamos diciendo que te vengas arriba y te abras un perfil de Twitter, Instagram, Linked In, Google +. Tumblr, Pinterest y Snapchat. ¡Por favor, no! Hay que saber definir qué redes sociales serán útiles para tu negocio según tus clientes y seguidores, y adecuar el calendario de contenidos para cada una de ellas. ¿No pensarás que se publica lo mismo en todas, no?

Así que, como ves, sin experiencia en la materia podrás tener una página de Facebook, pero si no sabes explotar el marketing de contenidos como Dios manda, no tendrá ninguna utilidad. Y no puedes olvidar que tu competencia quizás ya se ha puesto las pilas y está seduciendo a tus seguidores potenciales sin que te pispes. ¡No les dejes escapar! Si necesitas un community manager profesional que revolucione tu negocio, ¡consigue uno hoy mismo! ¡Que tiemble todo el mundo!

Abrir chat